Empezar un libro es difícil lo sé, soy la persona menos lectora que os podéis imaginar. Cuando me regalaron ese libro por mi cumpleaños me quedé en plan, "Claro que me voy a leer ese tocho, vas buena" Esa misma noche, estaba aburrida y cojí el libro, el principio no está tan bien como lo que viene después. En las primeras hojas no pillas muy bien el libro, pero al cabo de un capítulo estas completamente adicta. Me encantaba. Sólo pensaba en eso. Hasta que un día, cuando iba por la mitad del libro lo guardé en un cajón. Me olvidé de él hasta que un día lo ví. Recordé lo divertido que era, lo enganchada que me tenía, lo bien que me lo pasaba leyéndolo. Lo cojí de nuevo. Empezé a leer y lo acabé en dos días. He de admitir que el día que lo acabé, lloré. No porque el final fuera triste o no (Que no voy a descubriros nada), sinó porque nunca me había gustado un libro, y menos tanto como me ha gustado ese.
El argumento del libro:
Éste libro trata de una niña Estadounidense, llamada Jaqueline, a la que, debido a un accidente se le mueren sus padres. Ella no tenía familia Americana, por lo que se tiene que ir a vivir con su tía, a la que a penas conoce, a España. En América deja a su mejor amiga, Phoebe, su casa, el chico que le gustaba, Jason... Y en España emprende una nueva vida, donde encontrará el amor, que le será o no correspondido.
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